BICICLETA DE MONTAÑA

lunes, 9 de octubre de 2017

NATACIÓN: TRAVESÍA DEL CANAL DE MENORCA. septiembre del 2017

NATACIÓN: TRAVESÍA DEL CANAL DE MENORCA


HISTORIA DE UN INTENTO
por  Ricardo Brau 

PROYECTO NADANDO EN LA SOLEDAD


Fotografías exclusivas de la travesía



Día 30 de septiembre de 2017,   a las 7 y algún minuto de la mañana apunto de lanzarme al agua, me vuelve a la mente un pensamiento que me ha llevado a una realidad que me sumerge en un miedo y una angustia buscada y deseada.

14 meses de trabajo y entrenamiento ya quedan atrás; 14 meses que no sé si son suficientes!, pues nunca nada es suficiente!, nunca nada se sabe hasta que se llega se consigue o se finaliza, para continuar,  volver a intentarlo y buscar otra meta para vivir esa experiencia que es la vida.
Experiencias de vida que nos ayudan a sentir y valorar momentos que sólo el tiempo y los acontecimientos nos enseñan a corregir y mejorar.
Acontecimientos que se rigen a través del espacio y el tiempo enlazados por el movimiento; pues el movimiento es la fuente de la vida.

                              






El movimiento nos ayuda a que nuestros músculos fortalecidos por esa acción nos ayuden a realizar esos hábitos cotidianos que muchas veces hemos detestado y quejado por la pereza que nos producen realizarlos.



Nos quejamos sin valorar en don que poseemos!

Y cual es ese don? y yo digo!:  LA SALUD, LA AUTONOMÍA DE MOVIMIENTO , EL PODER PENSAR, EL AMOR PROPIO, EL SENTIDO COMÚN, LA VOLUNTAD Y EL TRABAJO HUMANO.

Y entonces que ocurre? 

Nos quejamos de la mala suerte! Nos quejamos de las injusticias sociales, de la opresión, de la falta de diálogo, de la manipulación elitista! nos quejamos porque no llegamos a fin de mes! nos quejamos porque decimos que la vida nos castiga sin merecerlo !, nos quejamos.............

Y que hacemos en la mayoría de las veces?

NADA ABSOLUTAMENTE NADA!

Sólo nos conformamos con lo que decimos que nos ha tocado.

Y yo pregunto ante esta postura?

DIOS MIO QUE DÍRIAN LOS MUDOS!  QUE VERÍAN LOS CIEGOS! QUE NO DEJARÍAN DE RECORRER Y ABRAZAR LOS PARALÍTICOS Y AQUELLAS PERSONA QUE VIVEN BAJO UN INMENSO DOLOR FISICOMENTAL QUE LOS CONSUME Y LOS MATA SIN TREGUA ALGUNA, Y A PESAR DE ELLO AHÍ ESTÁN DÁNDONOS LECCIONES DE VIDA EN CADA INSTANTE

Y ahora después de esta reflexión comento y digo!

DIOS MÍO QUE SUERTE TENGO!

Este es mi inmenso poder, este es mi don, mi fortuna, el destino de mi vida,  mi ayuda a mi mismo y poder ayudar aquellos que la necesitan.  EL PODER DEL MOVIMIENTO.

(Este texto pertenece a un apartado de mi próximo libro NADANDO EN LA SOLEDAD)
Autor:  Ricardo Brau

Travesía del canal de Menorca, septiembre de 2017

Con un sabor agridulce, pero con mi alma en paz: el sábado pasado día 30 de septiembre realicé mi intento de travesía a Nado del canal de Menorca.  Ya en aguas de la costa de Mallorca, después de todo el día en el agua, caída  la noche a tan sólo unos 5km de la llegada oficial, decidí poner final a mi intento.   El frío, el entumecimiento , picaduras de medusas en  la oscuridad junto al raciocinio del sentido común me obligó poner punto final a este inolvidable reto.
Sin neopreno con solo la ayuda de unas pequeñas aletas para compensar un poco mis 56 años de edad, pude finalizar un total de unos 33 km de nado durante casi 13 horas sin salir del agua.

Al salir del agua mi primer pensamiento y admiración fue para todas aquellas personas donde el nadar y cualquier tipo de reto son su pasión y su filosofía de vida, mi admiración a sus logros y a su espíritu de lucha por su sacrificio. 
Entre los muchos de esta lista de personas, quería destacar y agradecer el apoyo que me han brindado dos personas dedicadas también a estas causas; a la  nadadora Tita Llorens, una de las mejores nadadoras del mundo de aguas abiertas.  Y al que considero mi amigo Jacobo Parages, autor del libro: (Lo que aprendí del dolor)   




Agradecer al apoyo logístico que me acompañó durante la travesía, a Cesc y Tonio, muchas gracias a los dos. 

Y para el final de mi agradecimiento, lo dejo por ser especial para mí: a mi hijo Roger; para mí un orgullo de hijo;  su ayuda en los avituallamientos y sobre todo su presencia y compañía nadando junto a mí durante algunos km es un sentimiento que no se puede explicar: es  vivirlo y disfrutarlo.
Mi hijo y la ayuda de Dios me ayudaron a superar con creces ese límite que tenía marcado por mis posibilidades.




En mi libro Ejercicio en el medio acuático,  finalizo el mismo con el escrito de un pensamiento que he llevado a cabo en esta travesía,  Dice así:
A veces cuando  miro el horizonte y no puedo ver más allá, me esfuerzo en superar esa línea de los sueños.
Sueños que todos tenemos.
Sueños en los que creemos y queremos.
Sueños que dependen de la voluntad y el trabajo humano.
Sueños que a veces se desvanecen cuando el dolor del alma nos lleva a la desesperación.
Sueños por los que debemos luchar aunque esa desesperación nos consuma.
Sueños que vencen la debilidad humana y ayudan a superarnos.


Y Dios bien sabe que he superado ese límite.







Antes de lanzarme al agua la reglamentación de la travesía no contemplaba ningún tipo de ayuda para que la travesía constara en el registro de la FINA como tal, mi única y cuestionable ayuda fue unas pequeñas aletas que me dejaron diversas heridas en los pies; pero esto no era mi objetivo.
Mi único objetivo era el proyecto solidario al que me debía. Se han logrado recaudar unos cientos de euros para la fundación San Juan de Dios, dedicada al trabajo para la ayuda en la investigación del cáncer y cáncer infantil, así como ayuda a personas sin recursos y personas con minusvalías. Pero la plataforma sigue abierta hasta el día 15 de octubre de 2017, para poder continuar colaborando en donaciones; sólo hay que entrar en la plataforma :  migranodearena.org  y buscar en el reto solidario de Ricardo Brau: NADANDO EN LA SOLEDAD.


Intentaré continuar trabajando solidariamente con esta plataforma en otros eventos con el mismo nombre:  NADANDO EN LA SOLEDAD

MUCHAS MUCHAS gracias a todas las personas que me habéis animado.  MUCHAS MUCHAS  gracias a los que habéis colaborado en esta causa solidaria.
Y pido perdón humildemente por haberme quedado a las puertas,  pido perdón a los retractores y a quién quiera criticar con todo el derecho que le corresponde . Pero como he comentado al inicio, tengo mi alma en paz porque he cumplido mi intento.


Nadando en la Soledad es el título de mi próximo libro que estoy finalizando de escribir, en él reflejo y menciono valores de vida y de superación ; crítico sistemas ante la situación mundial y la escasez de recursos por intereses elitistas en contra del bienestar social, una historia desde un punto de vista personal y basado en los fundamentos de la salud  y los derechos universales.     Gracias a todos. 

Ricardo Brau